NUEVE Y DOCE
9:00 PM La luz de mi lámpara poco a poco se está apagando, mientras que yo medito y pienso en los primeros versos de este texto que yo quiero escribir, no con un bolígrafo, sino, con la tinta de mis lágrimas. Quiero imaginar que estoy bien y que ella descansa en santa paz, pero no sé que pasa cada vez que intento olvidarla y la recuerdo con mas fuerza. Cada noche mi conciencia y mi alma debaten con mi almohada sobre el porque de mis insomnios frecuentes.Trato de hacerme el v aliente, pero sé que es por ella... 10:00 PM Cada lágrima, cada momento, que tristemente me recuerda a la felicidad que un día rondó nuestra vida, uno a uno esos sentimientos, transformados en acuosas y diminutas expresiones que mi rostro demuestra con gran facilidad, caen en mi corazón vacío, vacío de amor. 11:00 PM Ni el trago mas fuerte, acaba con esta angustia, porque me embriagué de sus besos, de su mirada, de como me hizo conocer el mundo a su manera, me enseño a ser feliz. 12:00 PM Mi lámpara