CUANDO LA ADRENALINA ME SALVÓ


Choqué entre muchos muros

que hicieron ruidos en mi mente,
pero todo ello no me debilitó
haciéndome más fuerte ahora.

Había crecido ente mis decadencias
al centrar las caricias de la realidad,
no decidí decaer en las tormentas
porque dejé de pensar en ser víctima.

El deber ser siempre me ha perseguido
al querer enseñarme mis carencias,
no seguir el ejemplo de mis predecesores
porque reflejaron sus momentos tristes.

Había nacido dentro de una triste existencia
al final no le di sinfonía a esos pensamientos,
decidí tomar mis puños y enfrentar la vida
al acabar con un ciclo de odio y de tristeza.

Perdonar fue lo mejor que pude hacer
al saber que no vivo del colapso,
porque no soy otro soldado caído
soy el héroe de mi propia historia.

Jorge Luis Contreras Carlón 🇲🇽

Comentarios

Entradas más populares de este blog

LA LLORONA AQUÍ NO LLORA; PUES NO HAY NIÑOS QUE LLORAR.