CAMINOS

Di el primer paso,
pisé hierbas,
salté charcos,

aparté piedras,
hasta formar

un sendero.

No tenía nombre,
así que lo llamé “la vida”.

y me propuse a recorrerlo,
avanzando poco a poco,
pero había obstáculos,
piedras, muros, guardias;
Y me detuve frente a ellos,
me impedían el paso...
(Frenaban “la vida”)


Así decidí
abrir más senderos
y comencé a cambiar
el camino,
subiendo, bajando,
a veces girando y
encontrando otros caminos,
otros caminantes

y anduve con ellos.
Me enseñaron:
A quitar las rocas,
a bordear los muros,
a sortear los obstáculos;
Me quede con ellos
y mucho tiempo pasé
en otros caminos, pero
debía volver a
“la vida”.


Cruce los obstáculos y
los aparté del camino.

Y empedré “la vida”
para llevar carreta
y carga;
y avanzaba más cada día.


Se convirtió en carretera
y disfruté más del camino
(Disfrute más de “la vida”)

Pero la vi grisácea,
sin color,
triste por estar vacía.


Sentí pena por “la vida”,
así que sembré
flores, árboles,

arbustos verdes:
¡Parques de la vida!
(Se volvió alegre).


Mi camino
florecía en primavera,
matizaba en otoño...
¡Hermoso se volvió

mi camino!

Pero soledad encontré en
“la vida”:
No había otros caminantes,
no había otros caminos.
y decidí cambiar de nuevo
mi camino,
buscando otros senderos
buscando compañía.
Pero todo era en vano...
Seguía buscando,
seguía fallando,
encontraba otros senderos
pero no caminantes...
¡Se habían detenido!
¡Se dieron por vencidos!


No sortearon los obstáculos
y se quedaron frente a ellos.
Así que regresé a mi camino
con la soledad de compañía
y así sigo todavía:
¡Recorriendo mí camino!
(Recorriendo “la vida”).


Samuel Álvarez
Venezuela
16 años.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

LA LLORONA AQUÍ NO LLORA; PUES NO HAY NIÑOS QUE LLORAR.