LA SOLUCIÓN

Ella sale de la habitación en la que estuvieron viviendo juntos, él se intento marchar, ella triste y algo furiosa a la vez, tal vez un poco loca, decide correr hasta la cocina, con los ojos llorosos, él no se va a ir, de ninguna forma, ella lo ama, la única forma de conservar esta relación, ya marchita como una rosa, es matarlo, pero una parte de ella no quiere hacerle dañó, aunque algo de ella si quiere, sale de la cocina, tiene el cuchillo en la mano, y lagrimas en la otra, él la llama desde arriba,ella no responde, entra a toda prisa en la pieza, él no esquiva los golpes, lo agarraron desprevenido, cae muerto a pocos pasos de ella, esta suelta el cuchillo, y llorando dice "Era la única solución, te quiero solo para mi". A la mañana siguiente, se incendia la casa, no quedan rastros de ese amor, que yace sepultado en la memoria de quienes lo vivieron.

Virginia Andrea Llobera,
Argentina,
16 años.

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