AVENTURAS DE PAPEL

Se puede, perder el miedo sin ser inocente Se puede, jugar con fuego sin estar caliente Se puede, mirar al cielo sin perder el suelo  Se puede, correr muy lejos sin olvidar el camino  Se puede, claro que se puede ¿Lo crees? Génesis Sánchez Díaz, Ecuador.

Para ti, bella madre que bella te ves con trazos profundos en tu rostro  qué la vida marca a su antojo. Qué bella te ves  con el cabello alborotado y los párpados cansados por el tiempo dedicado. Qué bella te ves ya sin el cuerpo "perfecto" que solías tener por dar vida a un nuevo ser. Qué bella te ves sencilla y sin maquillarte en exceso por la falta de tiempo. Qué bella te ves por que sacrificaste muchas cosas  para consolidar tu hogar,  renunciando a aquello  con lo que soñabas... Qué bella te ves cocinando nuestras comidas preferidas  y sonreír nos ves, mimándonos a cada instante  y permitiéndonos correr calmando nuestra angustia hasta a la pesadilla vencer, enseñándonos a orar para a Dios conocer. Qué bella te ves, qué hermosa te ves. Génesis Sánchez Díaz, Ecuador.

Mis pensamientos sobre ella son todos buenos, me dio la vida y me entrega hasta hoy su sincero amor, el cual, a pesar de mis malos actos sería incapaz de guardar rencor. Entre sus brazos, me arrullaba suavemente, yo profundamente dormido en mi cuna y mientras tanto ella se desvelaba porque nada me pasara. Me recibía feliz al llegar de la escuela, en mis tareas, me guiaba con su mano, su palabra y su afecto, siempre me ha dicho que vaya caminando derechito por la vida con la frente en alto. Gracias reina de mi vida, por que sin importate nada, tú me quieres y me cuidas, me alientas cuando el sol de la alegría me alumbra, y por confortarme cuando la terrible obscuridad de la tristeza está asolando mi vida. Ya no quiero que rieges los cardos de tu sufrimiento con tus lágrimas. T e daré un beso en la frente y un abrazo caluroso, te llevaré a pasear por la ciudad más linda y recordaremos todas nuestras aventuras. Y aunque

Inay era un chico hindú de 7 años, pero no muy diferente a cualquiera que tuviera problemas típicos de un infante: padres que lo reprendían e ilusiones amorosas, pero cuando un lago misterioso brotó tras la puerta del cuarto del conserje de su escuela, sintió temor, quiso contárselo a alguien más, pero sabría que sus padres y los dioses lo tomarían mal. Un día, podríamos decir que Inay bebió accidentalmente del agua misteriosa y cayó no solo en u n estado de sueño sino en un lugar llamado Rahasy, aquí se podían ver cosas que civilizadamente no se verían en un mundo normal, como hombres con orejas de elefante tratando de suplantar a los vendedores de ventiladores, vacas siendo objeto, no de burla sino de admiración, ya que estas eran las más famosas cantantes de rock and roll de la India, se hacían llamar las Rahasy Star. Inay vio desbordar su loca imaginación y decidió formar parte de tan famoso conjunto musical: Tantos años de fama y discos que se producían a borbollones y se vendían

Los Mártires de Chicago en 1886 y muchos otros personajes ilustres nos dejaron un gran legado, el de no rendirse y clamar y en ciertos casos a ofrendar nuesta vida por ver un futuro mejor:  El agricultor, afanoso en el campo, sembrando y cosechando vida. El obrero construyendo nuevos caminos hacia el progreso. El maestro, formando, no solo estudiantes, sino también seres humanos integros, que sepan responder a la sociedad de una manera positiva y esforzada, dando todo de si para así procurar el bien común. La mujer, costurera, maestra, también, escritora, que se desenvuelve de manera excelente en este y en muchos otros oficios y profesiones. Trabajar de verdad, no solo consiste en poner al máximo las fuerzas de nuestro cuerpo, de nuestras manos, de nuestros pies, sino también, la fuerza de la mente para planificar correctamente las cosas y la del corazón para tener el valor y el optimismo de que no hay obstaculo alguno que nos impida conseguir lo que anhelamos y más cuando es por el